Quiero aprovechar este foro para mostrar mi más profunda tristeza al ver las calles de nuestro pueblo desiertas cuando debían de encontrarse a rebosar de gente celebrando la Pasión, Muerte y Resurrección de nuestro señor Jesucristo.
No tengo palabras de consuelo para la mayoralía del año y sus familias que, con tanto esmero y cariño han dedicado estos últimos años a preparar tan gratificante misión como es la de responsabilizarse de celebrar los actos de la Semana Santa de nuestra ciudad.
También lo hago extensivo a cada uno de los cofrades, mayorales y clavarios de nuestra Cofradía que, con sus diferentes anhelos, todos tenían grandes esperanzas de compartir esos momentos que nuestra hermandad nos ofrece.
Pero quizás debemos verlo desde otro prisma, sin duda esta intimidad que nos ha provocado la cruel pandemia nos invita a vivir este Viernes Santo en soledad, en la soledad compartida con nuestra familia más cercana, en la soledad rota por ese único medio de expresión que tenemos que son nuestras ventanas y balcones y en la soledad más intima de nuestra humilde oración.
Este Viernes Santo, tengamos todos un momento de recogimiento, seguro que la fuerza de este espíritu común, va a hacernos triunfar ante la enfermedad y la muerte.
Este paréntesis no va a ser un olvido a nuestras costumbres y tradiciones, al contrario; nos va a reforzar para que en el próximo año y al otro y al otro …nuestra Cofradía realice una Semana Santa con mayor esplendor si cabe.
Cuidaos cada uno de vosotros y por supuesto a vuestras familias y recordad que, en este momento, el ser cofrade de la Sangre implica una ejemplaridad de comportamiento que todos tenemos el deber de asumir y del que nos debemos sentir orgullosos.
Puríssima Sang de Jesucrist
Ánimo a todos y mucha fuerza.
El Presidente de la Cofradía de la Purísima Sangre
de Nuestro Señor Jesucristo
Miguel Chordá Piedra